Medidas por y para los menores Array Imprimir Array
Lunes, 20 de Abril de 2020 09:51

Esta Organización de Consumidores, disconforme ante las medidas de permitir salir a niños y niñas a la calle, entiende que la situación a la que se enfrentan las familias en este confinamiento ha provocado en los menores una serie de comportamientos en los que contar con unos minutos al aire libre pueda suponer un alivio. Sin embargo, la salud y seguridad han de primar en estas circunstancias y estas salidas pueden conllevar a un empeoramiento en las cifras de contagios y un retroceso en la lucha contra el coronavirus.

Si bien, toda la población está sufriendo consecuencias psicológicas producidas por el confinamiento, los adultos disponen de más habilidades para gestionar esta carga emocional en comparación con la población infantil, que aún no ha desarrollado estas capacidades, aunque sí gozan de mayor facilidad de recuperación psicológica posterior. Casi la totalidad de los menores está padeciendo alteraciones a nivel conductual, cognitivo y emocional, tales como trastorno en el sueño, alimentación, problemas de concentración e incluso de comportamiento. De ahí que se antojen necesarias medidas de apoyo para menores y familias que les ayuden a sobrellevar estas semanas.

Desde la Unión de Consumidores de Málaga apelamos a la responsabilidad de los padres y madres de cara a las próximas medidas ofrecidas por el Gobierno en relación a que los niños y niñas puedan salir a la calle. Estas medidas están únicamente orientadas a los niños, a su bienestar físico y mental, nunca deberán ser utilizadas como excusa para salir a la calle incumpliendo la normativa ni el confinamiento. Además, se deberían tener en cuenta factores como el tipo de núcleo o densidad de población para llevarlo a cabo con las mayores garantías. La seguridad y la prevención debe ser la piedra angular en esta situación.

Entendemos de la necesidad de las familias, preocupadas por el bienestar de sus hijos e hijas, - sobre todo en determinadas circunstancias - de que los niños/as puedan disponer de un momento al aire libre pero llamamos a la responsabilidad de los progenitores para que sigan las pautas exactas que se estipulen para ello por parte del Gobierno, ya que de ello depende la seguridad y salud de los menores, así como del resto de la población. Esta modificación del confinamiento no puede suponer un paso atrás en la lucha contra el Covid-19.

La solidaridad, la sensatez y el respeto por las normas debe continuar siendo la pauta general en la población, todo ello en defensa de la salud como pilar principal. Durante estas semanas, el esfuerzo de padres, madres y niños/as ha sido extraordinario, por lo que no se debe bajar la guardia. Recordamos que, aunque con mayor defensas ante el virus según numerosos estudios científicos, la población infantil y juvenil también se contagia y pueden ser un importante vector de contagio para sus familiares, por lo que debe continuar extremándose la prevención.

 

 

Resultados Estudio Propio

 

El 90% de los niños han experimentado cambios en el comportamiento durante el confinamiento

 

El 72,4% considera necesarias medidas de apoyo a los menores.

 

Siete de cada diez indican estar de acuerdo en que salgan a la calle con estrictas restricciones. Acotar el tiempo y espacio, así como ir acompañado y siguiendo todas las pautas de seguridad e higiene se recogen como propuestas.

 

La responsabilidad de los progenitores en el cumplimiento de las normas será fundamental para evitar contagios.

 

Durante los últimos días, esta Unión de Consumidores de Málaga dispuso una encuesta para conocer la opinión de la ciudadanía sobre uno de los asuntos que mayor incertidumbre ha generado esta semana: la prevista salida de los niños y niñas a la calle durante el confinamiento. Los resultados son los siguientes:

 

En relación a si están de acuerdo con las propuestas de permitir salir a los niños/as durante un tiempo determinado, un 69,1% ha indicado que sí. Para tres de cada diez esta medida es errónea.

 

Consultados por la justificación de su respuesta anterior, nos encontramos:

 

Entre las respuestas positivas, destacan aquellos que afirman que los niños necesitan estar al aire libre y tomar el sol, por lo que resulta vital para su salud mental y física. Gran parte de la muestra afirma que esta necesidad es mayor en residentes en pisos sin terraza o balcón. La mayor parte propone que sea trate de paseos muy controlados, cerca del domicilio y acompañados siempre por un adulto y con una duración de entre 5 a 30 minutos (como acompañar a tirar la basura o pasear el perro). Son también muchos los que temen consecuencias - sobre todo psicológicas - en los niños, como fobias posteriores a salir a la calle. También sobresalen aquellos que residen en zonas rurales o de menor población y que afirman que estas salidas están más justificadas. Asimismo, también exponen limitaciones para aquellos niños que convivan - o incluso sean - pacientes de riesgo.

 

El miedo al contagio, con la consiguiente subida de afectados, es el principal argumento entre las respuestas negativas. Muchos ven muy complicada la regulación en las salidas, por ejemplo en cómo controlar cuánto tiempo se estará en la calle. La irresponsabilidad y el incumplimiento de las normas es otro de los miedos expuestos con mayor frecuencia, así como la dificultad al controlar a niños pequeños en la calle en relación, sobre todo, a la higiene. Destaca también el número de progenitores que afirman que hasta que las cifras no mejoren, sus hijos no saldrán a la calle.

 

Otra de las cuestiones planteadas, en caso de tener hijos, era si habían notado algún cambio en sus conductas en las últimas semanas. Las respuestas han sido:

 

61,4% --> Cambios de humor, aumento del número de llantos o berrinches, mayor irritabilidad.

50,8% --> Aumento de actividad, nerviosismo.

53,1% --> Alteraciones del sueño.

38,2% --> Alteraciones con la comida.

40,8% --> Sentimientos de nostalgia o tristeza

9,3% --> ninguno de los anteriores

Otros: aumento pereza; desilusión; problemas fisiológicos (orina); falta de motivación; agresividad.

 

Sobre si consideran si esos cambios han venido ocasionados por el confinamiento, el 77,6% ha indicado que sí. Un 7,9% dio una respuesta negativa y el 14,4% piensa que tal vez.

 

También se consultó por las medidas que propondrían para paliar esa situación. La gran mayoría de la muestra ha indicado que serían necesarias medidas de apoyo para las familias (talleres, programas especiales en TV para los niños, apoyo a los padres para llevar la situación). Además, la regulación estricta de esas salidas infantiles - realizadas por ejemplo por turnos de edad - es otra de las propuestas ciudadanas, así como reducir la carga de deberes y la realización de test masivos a la población.

 

La última cuestión consultaba si creen necesaria alguna medida de apoyo psicológico para menores y familias. El 72,4% indica que sí lo ve necesario.

 

De esta forma, la mayor parte de la muestra ve necesario que los niños y niñas puedan salir a la calle, pero de forma controlada y restringida: salidas acotadas en tiempo y espacio, acompañados por un adulto y bajo todas las medidas de seguridad e higiene conocidas. La necesidad de salir a la calle la fundamentan en los cambios experimentados en la conducta de los niños en un porcentaje alto de los casos.

 

*Encuesta realizada del 17 al 20 de abril de 2010 (hasta 8.30 am).